Seguimos bajo el signo del coronavirus, pero la vida continúa, y el trabajo también. En mi caso, al llevar ya un tiempo trabajando desde casa, salvo cuando durante el confinamiento el país estuvo medio paralizado, sigo con mi rutina habitual: trabajando desde casa y enviando las traducciones juradas por correo postal o certificado.
Mi jornada siempre incluye un tiempo reservado para urgencias, de modo que si el documento no es muy largo o muy complejo, puede contar con recibir la traducción en poco tiempo.
Para cualquier duda, puede contactarme por las mañanas por teléfono, y si no, puede dejarme un mensaje por whatsapp, SMS o correo electrónico, y me pondré en contacto lo antes posible. No olvide indicar su nombre.